Autor Meleti Vivlon | Feb 9, 2020 | Traductor Judá Ben-Hur | Feb 11, 2020

En nuestro primer artículo, examinamos la Estela de Adad-Guppi, un documento histórico que demuele rápidamente la teoría de la Watchtower de posibles brechas en la línea establecida de reyes neo-babilónicos. Para la próxima evidencia primaria, veremos el planeta Saturno. Este artículo nos ayudará a comprender cómo la posición de Saturno en el cielo puede usarse fácilmente para establecer el período de tiempo en que Jerusalén fue destruida.

En nuestra era moderna, damos por sentado la medida del tiempo. Podemos olvidar fácilmente que toda la tecnología se basa en el movimiento de un cuerpo planetario, específicamente nuestra Tierra. Un año es el tiempo que le toma a la Tierra hacer una revolución completa alrededor del sol. Un día es el tiempo que le toma a la Tierra hacer una revolución completa alrededor de su eje. El movimiento de los planetas es tan consistente, tan confiable, que las civilizaciones antiguas usaron el cielo como un calendario celestial, una brújula, un reloj y un mapa. Antes del GPS, el capitán de un barco podía navegar en cualquier lugar de la tierra con solo un reloj y el cielo nocturno para guiarlo.

Los babilonios eran expertos en el estudio de los movimientos astronómicos. Durante siglos, registraron movimientos planetarios, solares y lunares así como eclipses con absoluta precisión. La combinación de estas posiciones planetarias los coloca en una línea de tiempo absoluta que podemos rastrear con precisión. Cada combinación es tan única como una huella digital humana o un boleto de lotería.

Piense en una lista cronológica de 12 boletos de lotería ganados en fechas específicas durante un año determinado. ¿Cuáles son las posibilidades de que esos mismos números exactos vuelvan a aparecer en fechas diferentes?

Como dijimos en el primer artículo, nuestro propósito aquí es usar el artículo de dos partes titulado “¿Cuándo fue destruida la antigua Jerusalén?”, Publicado en los números de 01 de octubre y 01 de noviembre de 2011 de La Atalaya para demostrar claramente que los editores tenían todo la información necesaria para revelar la verdad de que se habían equivocado acerca del 607 a.E.C todo el tiempo, pero decidieron ignorarla y mantener una enseñanza falsa dañina.

Con este fin, veamos como se puede usar la ubicación de Saturno para establecer la precisa ubicación en el tiempo  del 37o año del reinado de Nabucodonosor. ¿Por que importa? Es importante, porque de acuerdo con Jeremías 52:12, “y en el mes quinto, a los diez días del mes, siendo el año diecinueve del rey Nabucodonosor, rey de Babilonia, vino a Jerusalén Nabuzaradán, capitán de la guardia, que estaba al servicio del rey de Babilonia..” y, Jerusalén fue destruida. El asedio duró más de un año (Jeremías 5). Jeremías tuvo una visión en el año 18 del reinado de Nabucodonosor mientras la ciudad estaba sitiada (Jeremías 32:1,2) Entonces, si podemos encontrar con precisión el año 37 del reinado de Nabucodonosor, es una operación de sustracción sencilla para llegar al año de la destrucción de Jerusalén.

Puede estar seguro de que si los datos astronómicos apuntaran al 607 a. E.C., el artículo de La Atalaya los estaría señalando por todas partes. Sin embargo, no se menciona en absoluto la posición de Saturno. Ignoran por completo esta valiosa evidencia. ¿Por qué? Veamos la evidencia, ¿de acuerdo?

La tablilla VAT 4956 es un número asignado a una tablilla de arcilla que en lo particular describe los datos astronómicos relacionados con el 37o año del reinado de Nabucodonosor.

Las dos primeras líneas de la traducción de esta tableta dicen:

  1. Año 37 de Nabucodonosor, rey de Babilonia. Mes I. (el primero [5] de los cuales era idéntico con) el 30o [6] (del mes anterior) [7], la luna se hizo visible detrás del Toro del Cielo [8]; [puesta del sol hasta la puesta de la luna:]…. [….] [9]
  1. Saturno estaba frente a la Golondrina. [10], [11] El segundo, [12] en la mañana, un arco iris se extendía en el oeste. La noche del 3, [13] la luna era de 2 codos frente a [….] [14]

La línea dos nos dice que “Saturno estaba frente a la Golondrina” (La región del cielo nocturno actualmente llamada Piscis).

Saturno está mucho más lejos de nuestro Sol que la Tierra, por lo que lleva mucho más tiempo completar una órbita completa, de hecho, una sola órbita saturnina es de unos 29.4 años terrestres.

Nuestros relojes modernos se dividen en 12 horas. ¿Por qué 12? Podríamos haber tenido 10 horas diarias y 10 horas nocturnas, con cada hora compuesta de 100 minutos cada una, y cada minuto dividido en 100 segundos. De hecho, podríamos haber dividido nuestros días en segmentos de cualquier longitud que elijamos, pero 12 fue lo que los antiguos observadores del cielo decidieron hace mucho tiempo.

Los antiguos astrónomos también dividieron el cielo en 12 segmentos conocidos como constelaciones, vieron patrones en agrupaciones de estrellas que les parecieron familiares, pensaron que estos se parecían a animales y en consecuencia, nombraron a cada grupo de estrellas.

A medida que Saturno orbita alrededor del Sol, parece moverse a través de las 12 constelaciones. Así como la manecilla de la hora de un reloj tarda una hora en moverse por cada uno de los doce números del reloj, Saturno tarda aproximadamente 2,42 años en moverse por cada constelación. Por lo tanto, si se observara Saturno en Piscis, en la parte superior de nuestro reloj celestial, en el año 37o de Nabucodonosor, no volvería a aparecer allí durante casi tres décadas.

Como señalamos antes, dada la precisión con la que podemos fechar eventos basados ​​en datos de movimientos planetarios, uno debe preguntarse el por que la Sociedad Watchtower omitió un hecho tan importante para un año crítico y central de su doctrina. Seguramente cualquier cosa que demuestre categóricamente el 607 a.E.C. como la fecha de la destrucción de Jerusalén habría sido, sin duda alguna, como el frente y el centro del artículo de La Atalaya.

Puesto que sabemos exactamente donde está Saturno hoy, incluso puede verlo usted mismo a simple vista, todo lo que tenemos que hacer es ejecutar los números hacia atrás en segmentos orbitales de 29.4 años. Por supuesto, eso es tedioso. ¿No sería bueno si tuviéramos un software para hacer eso por nosotros con el tipo de precisión que una computadora puede ofrecer? El artículo de La Atalaya de noviembre menciona una pieza de software que usaron para sus cálculos. Si realizaron un cálculo en la órbita de Saturno, no lo mencionan, aunque es difícil imaginar que no lo hubieran hecho con la esperanza de establecer 607 a.E.C. como “la fecha”.

Afortunadamente, también tenemos acceso a un maravilloso software que se puede descargar y ejecutar en computadora, en un teléfono inteligente o tableta. Se llama SkySafari 6 Plus y está disponible en la web o en las tiendas Apple y Android. Le recomendaría que lo descargue usted mismo para que pueda realizar su propia investigación. Asegúrese de obtener la versión «Plus» o superior, ya que la versión más barata no permite cálculos durante las fechas antes de Cristo.

Aquí hay una captura de pantalla de la configuración utilizada para nuestra propia investigación:

[Nota del Traductor:

Los datos para el desarrollo de la investigación son:

Fecha: 22 de Abril del 588 A.C.

Hora:1:00 AM

Locación: Bagdad

Vía Láctea: Realista

Constelaciones: Tradicional + Moderna + Mítica

Esto significa que el algoritmo calculará como un observador vió el cielo nocturno la noche del 22 de Abril del 588 A.C. desde Bagdad, Babilonia (actual Iraq)].

La ubicación es Bagdad, Iraq, que está cerca de donde se encontraba la antigua Babilonia. La fecha es 588 A.C. El Horizonte sobre el cielo está oculto para que sea más fácil ver las constelaciones de fondo.

Ahora veamos si la fecha de 588 A.C. produce una coincidencia con lo que los astrónomos de Babilonia registraron para la posición de Saturno durante el año 37 de Nabucodonosor. Recuerde, dijeron que aparece frente a la Golondrina, que hoy se conoce como Piscis.

Aquí está la captura de pantalla:

Como vemos aquí, Saturno estaba frente a la constelación de Cáncer en el año 588 A.C.

Mirando la tabla anterior que nos muestra las 12 constelaciones, vemos que Saturno tendría que moverse a través de Leo, Virgo, Libra, Scorpio, Sagitario, Capricornio y Acuario, antes de llegar a Piscis o la Golondrina. Entonces, si sumamos 20 años y vamos con la fecha que los arqueólogos dicen que fue el año 37o de Nabucodonosor, esto es, el año 568 A.C. ¿dónde está Saturno?

 

 

 

 

 

Y allí tenemos a Saturno en Piscis, justo donde los astrónomos de Babilonia dijeron que estaba en el año 37o del reinado de Nabucodonosor. Eso significaría que su decimonoveno año caería entre 587/588 A.C., tal como afirman los arqueólogos, y según Jeremías, fue cuando Nabucodonosor destruyó Jerusalén.

¿Por qué la Organización nos retendría esta información

En el “Broadcasting” de noviembre de 2019 en jw.org, el miembro del Cuerpo Gobernante, Gerrit Losch, nos dijo que “Mentir implica decir algo incorrecto a una persona que tiene derecho a saber la verdad sobre un asunto. Pero también hay algo que se llama una media verdad… Así que necesitamos hablar abierta y honestamente entre nosotros, no retener fragmentos de información que podrían cambiar la percepción del oyente o engañarlo.

¿Pensaría usted que retener estos datos astronómicos vitales de nosotros que señalan el año de la destrucción de Jerusalén, equivale a retener fragmentos de información que podrían cambiar la percepción” que tenemos alrededor de 607 a.E.C. y 1914 E.C.? ¿Está la Organización, a través de su principal instrumento de enseñanza, “hablando abierta y honestamente” con nosotros?

Podríamos disculpar esto como un error cometido debido a la imperfección. Pero recuerde, Gerrit Losch estaba definiendo lo que constituye una mentira. Cuando un verdadero cristiano comete un error, el camino correcto es reconocerlo y corregirlo. Sin embargo, ¿qué pasa con alguien que dice ser un verdadero cristiano que sabe que algo es verdad y, sin embargo, oculta esa verdad para mantener una enseñanza falsa? ¿Cómo lo llama Gerrit Losch?

¿Qué motivaría tal acción?

Debemos tener en cuenta que fijar el año 607 a.E.C. como el año de la destrucción de Jerusalén es la piedra angular de la doctrina de 1914. Mover la fecha a 588 a.E.C., y el cálculo para el comienzo de los últimos días se traslada a 1934 a.E.C.. Pierden la Primera Guerra Mundial, la gripe española y las hambrunas causadas por la guerra como parte de su “señal compuesta». Peor aún, ya no pueden reclamar 1919 como el año en que Cristo Jesús los designó como el Esclavo Fiel y Discreto (Mateo 24:45-47). Sin ese nombramiento de 1919, no pueden reclamar el derecho de ejercer autoridad en nombre de Dios sobre el rebaño de Cristo. Por lo tanto, tienen un poderoso interés personal en apoyar la doctrina de 1914. Aún así, es difícil imaginar que los hombres que se han estimado por toda la vida podrían ser capaces de perpetrar a sabiendas un engaño tan colosal. Sin embargo, un pensador crítico mira la evidencia y no permite que la emoción nuble su pensamiento.

(Para mayor análisis de la enseñanza sobre el año 1914 vea el artículo en inglés 1914 – A Litany of Assumptions).

Evidencia adicional.

Hay otra evidencia que la Organización ha retenido. Como vimos en el último artículo, necesitan que aceptemos la creencia de que hay una brecha de 20 años en la línea de tiempo de los reyes de Babilonia. Esa supuesta brecha les permite mover la fecha de la destrucción de Jerusalén a 607 a.E.C.. Afirman que faltan 20 años de información del registro escrito. En el último artículo, demostramos que no existe tal brecha. ¿Los datos astronómicos también demuestran la ausencia de tal brecha? Aquí está la lista de dos reyes predecesores de Nabucodonosor.

Rey

Años de reinado

Período de reinado

Kandalanu

22 Años

647-626 a.E.C

Nabopolassar

21 Años

625-605 a.E.C.

Nabucodonosor

43 Años

604-562 a.E.C.

 

Estos nombres y fechas están establecidos por la «Tabla de Saturno (British Museum Index BM 76738 + BM 76813) que se encuentra en un libro escrito por N. W. Swerdlow, titulado, Ancient Astronomy and Celestial Divination, candhapter 3,» Observaciones babilónicas de Saturno». [i]

La línea 2 de esta tablilla dice que en el año 1, mes 4, día 24 del reinado de Kandalanu, Saturno se encontraba frente a la constelación de Cáncer.

Usando los datos de esta tablilla y los años registrados del reinado de cada rey, podemos ver que los datos astronómicos siguen coincidiendo con las posiciones de Saturno hasta con el Rey Kandalanu, quien comenzó a gobernar en 647 a.E.C.

Esta segunda confirmación, después de la evidencia de nuestro último artículo, da un golpe doble a la ficción de la Organización de una brecha de 20 años. Sin lugar a dudas, esta es la razón por la cual esta evidencia nunca llegó al artículo de dos partes de 2011.

 

 

Examinando el argumento de La Atalaya.

En la página 25 de La Atalaya del 01 de Noviembre del 2011 encontramos el siguiente argumento a favor del año 607 a.E.C.:

“Además de los eclipses ya mencionados, en la tablilla hay trece observaciones lunares y quince planetarias que detallan la posición de la Luna y de los planetas en relación con ciertas estrellas o constelaciones.18

Debido a que las posiciones lunares son más confiables, los investigadores han estudiado cuidadosamente las trece posiciones lunares registradas en VAT 4956”.

¿Por qué la Organización va por las posiciones de la luna en vez de las observaciones planetarias?

La nota 18 del pie de página nos dice: “Aunque el signo cuneiforme para Luna es claro e inconfundible, algunos de los signos para los nombres de los planetas y sus posiciones son confusos.

Es probable que el lector que confía en quien preparó lo que lee, no se dé cuenta de que no se menciona qué «signos para los nombres de los planetas y sus posiciones son confusos«. Además, no se nos dice quiénes son los investigadores que han analizado cuidadosamente las «13 observaciones de posiciones lunares». Para que podamos estar seguros de que no hay sesgo, estos investigadores no deben tener conexión con la Organización. Además, ¿por qué no comparten los detalles de su investigación como lo hemos hecho aquí en este artículo, para que los lectores de La Atalaya puedan verificar los hallazgos por sí mismos?

Por ejemplo, hacen esta afirmación del segundo artículo de La Atalaya:

«Que de las trece observaciones lunares, no todas coinciden con las posiciones de la Luna en el año 568-567 a.E.C., pero todas sí coinciden con las del año 588-587 a.E.C., veinte años antes”. (pág. 27).

Ya hemos visto en estos dos artículos de La Atalaya que los datos duros tanto arqueológicos como astronómicos y la evidencia de fuentes primarias han sido omitidas o  han sido tergiversadas por el Cuerpo Gobernante de los Testigos de Jehová con respecto a la doctrina del año 607 a.E.C.. Gerrit Losch, en el video citado anteriormente, dijo: “Las mentiras y las verdades a medias socavan la confianza”. Un proverbio alemán dice: «Quien miente una vez no se le cree, incluso si dice la verdad”.

Dado eso, difícilmente el Cuerpo Gobernante puede esperar que tomemos ahora todo lo que escriben como la verdad del evangelio. Necesitamos verificar las cosas por nosotros mismos para ver si nos están diciendo la verdad o si nos están engañando. Bien puede ser un desafío para aquellos de nosotros criados como Testigos de Jehová creer que el liderazgo de la Organización podría ser capaz de engañar deliberadamente, sin embargo, los hechos que ya hemos descubierto hacen que sea difícil mirar hacia otro lado. Dado eso, nos tomaremos el tiempo en un artículo futuro para examinar su reclamo para ver si los datos lunares realmente apuntan a 588 a.E.C. contra 586 a.E.C.

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[i] Use https://www.worldcat.org/ para encontrar este libro en su librería.

[ii]http://www.adamoh.org/TreeOfLife.wan.io/OTCh/VAT4956/VAT4956ATranscriptionOfItsTranslationAndComments.htm